Con la globalización, en la que de momento se consuma la Modernidad, hemos tomado conciencia de la insuperable diversidad del género humano, de culturas y religiones. Es, sin duda, una riqueza y un progreso que merecen nuestro elogio. Sin embargo, no es un momento histórico fácil de asimilar. Para muchos implica un profundo relativismo de […]… Con la globalización, en la que de momento se consuma la Modernidad, hemos tomado conciencia de la insuperable diversidad del género humano, de culturas y religiones. Es, sin duda, una riqueza y un progreso que merecen nuestro elogio. Sin embargo, no es un momento histórico fácil de asimilar. Para muchos implica un profundo relativismo de […]